Tu rutina de cuidado de la piel del rostro

Tengas la piel que tengas hay unos básicos en el cuidado de la piel que no debes escapar. La piel necesita renovarse y como, por diversos factores esta renovación se enlentece, debemos ayudar. Esa es la primera de las claves para tener una piel luminosa, lisa y radiante.

Tengas la piel que tengas hay unos básicos en el cuidado facial que no debes escapar.

La piel necesita renovarse y como, por diversos factores esta renovación se enlentece, debemos ayudar. Esa es la primera de las claves para tener una piel luminosa, lisa y radiante.

Te compartimos los pasos fundamentales en el cuidado

Primer paso:

Limpiar el rostro 2 veces al día. Por la mañana, para remover los residuos que la piel liberó durante la noche y por la noche para retirar las toxinas, maquillaje y polución. Sí, aunque no te maquilles es necesario limpiarla.

¿Cómo limpiarla?

Elegir un producto adecuado para nuestro tipo de piel y según lo que nos agrade, podemos optar por espumas, leches, aguas micelares, geles. Los jabones no los recomendamos para la limpieza del rostro ya que pueden resecarla.

Segundo paso:

Tonificar la piel. Muchas veces este paso no se realiza porque no se ve la utilidad. La importancia de usar un tónico facial es para terminar de remover las impurezas y para dejar la piel del rostro equilibrada para recibir el tratamiento posterior. Existen varias alternativas, siempre recuerda elegir un tónico adecuado a tu piel. Si tu piel es grasa nos inclinamos por un tónico astringente. Si tu piel es mixta, por uno equilibrante. Para las pieles secas, tónicos que hidraten.

Una muy buena alternativa es usar hidrolatos, (conocidos también como agua florales) el de rosa damascena es excelente para la piel seca o apagada y el de manzanilla para la piel sensible. 

Tercer paso:

Aplicar un tratamiento específico para el contorno de los ojos. Cuidar el contorno de los ojos con un tratamiento específico para esa zona tiene muchísimas ventajas. Disminuimos las ojeras, alisamos las líneas o arrugas, hidratamos y damos luminosidad.

Cuarto paso:

Es el momento del serum y/o la crema. En orden primero aplicamos el serum y luego la crema. O podemos mezclarlos y ponerlos juntos. Busca siempre consejo experto para ver cuál es la mejor crema o serum para tu piel.

Plus una vez por semana:

Una mascarilla o exfoliación. De esto hablaremos en otro post.

Plus experto: 

Usar un rodillo, gua sha o realizar un masaje facial para que el producto penetre mejor y para relajar los rasgos. Hazlo al menos 1 vez por semana.